Sunday, November 04, 2007

Relatos enzarpados (2): Carnaza

Tenemos Audis y Volvos y BMW. Cruceros por el Caribe y piscinas climatizadas. Ropa de marca y muebles Stressless. Vajillas Arcoroc y colchones Bultex. Ternera Wellington, lubina y pollo Tetrazzini en bandejas de plástico blanco con cierre transparente lista en cinco minutos con microondas. Liftings y ortodoncias y cinturones tonificadores de abdominales. Televisores de plasma y baños con hidromasaje. Tarjetas de visita con filigranas de oro y sábanas Vianney y Rolex siempre puestos en hora.

Leemos a Murakami y a Tolstoy y a Nietzsche y entendemos de qué va el rollo. Vemos a Wong Kar Way a von Trier a Ang Lee y desmontamos sus argumentos con facilidad. Sabemos que Bach, Beethoven y Wagner, fueron piezas clave en la evolución de la música académica occidental. No hay exposición lo suficientemente underground a la que faltemos. Conocemos a los últimos talentos en ciernes. Sabemos la forma y uso de los dieciséis cubiertos que ponen delante de nuestras narices en un cóctel de alta alcurnia.

Somos adalides de nuestra generación. Estamos a punto de caramelo. A dos peldaños del fin último. De la realización personal.

Somos el gran premio. El boleto premiado con el millón de dólares. Estamos a dos peldaños de Dios. No, qué se joda Dios. Vivimos, y por lo tanto somos, mejor que Dios. Dios debería bajar a servirnos el té en nuestro juego de té Johnson Brotters antes de irnos a jugar al paddle al club de campo.

Tenemos y sabemos de todo…

Y estamos enganchados al Xanax porque no podemos dormir. Al Vicodin. A la lectura compulsiva de revistas de cualquier tipo para no quedarnos atrás en nada. A la última droga de diseño para no quedar desfasados. Al Botox y a las tablas de ejercicios para no dejar de ser admirados. No queremos que dejen de admirarnos. Nos fascina el público, que nos pregunten, que nos adulen, que nos envidien. Queremos estar en el grupo de gente a quien espiar. Nunca tenemos suficiente.


Conocí a un tipo que quería ir más lejos que nadie. La realización final. El más aventajado. El nivel más elevado. El acto definitivo.
Y se metió una pistola en la boca y se pegó un tiro.

“Superadlo” –dejó escrito.

Lo enterraron en un ataúd Cofani Funibri, siempre le había gustado lo italiano. Una semana después hubo varias bajas más en el club de campo. Los familiares de la gente pedían ataúdes a la casa italiana de forma conjunta. Para ahorrar costes de envío.

Queremos ser perfectos.

Y no te das cuenta de que: Por mucho que te esfuerces no llegarás a ser perfecto. Es eso lo que nos hace seres imperfectos. El miedo a reconocer que en nuestra finitud llegará el momento en el que tengamos celulitis, estrías, michelines, arrugas, más pelos saliendo de nuestra nariz y orejas que cubriéndonos la cabeza…y nos iremos olvidando de todo y nos temblarán las manos y no se nos levantarán las pollas ni se nos mojarán las vaginas. La lucha contra el hecho futuro, la certeza, de que nuestra carne colgará algún día y acabará por pudrirse bajo un puñado de tierra.

No somos ejemplos a seguir, ni fascinantes ni ideales ni irrepetibles ni únicos. No tememos a la muerte como final. Al fin y al cabo sabemos que entra en el lote. Cuando naces ya te estás muriendo, lo que hay en medio es una suma de variables. De posesiones y palabras y actos y conocimientos que dejarnos.

Tememos no ser recordados, pero te olvidas de algo: tampoco somos memorables.

Somos el nombre que va detrás del nombre de alguien. Somos la cara tras la cara tras la cara del resto. Estamos hechos de la misma materia erosionable que todo lo demás. No somos el premio gordo que Dios puso en la tierra. Ni el boleto premiado.

No somos una cifra de bonitas formas.

Somos imperfectos, cortantes, hechos a trazos inacabados.

Somos números impares.

Somos...









10 comments:

Anonymous said...

Se me ha puesto el pelo de gallinita con tus últimas palabras.

Nos devoramos a nosotros mismos, somos como el cuadro de Saturno devorando a sus hijos, sólo que nuestros hijos somos nosotros mismos en cada una de las evoluciones que creamos para intentar no apearnos del tren. Pero habrá un momento en que no haya nada que devorar o será tan añejo, tan ajado que nos producirá un asco terrible, entonces sentiremos pena de nosotros mismo.

Con suerte podrás hacer una manada con aquellos que estén como tú o aplicar la digna muerte del ciudadano romano, en un acto que ellos consideraban de hombría, quitate de enmedio cuando no te seas últil en un último acto de libertad.

Sea como sea no tendremos mejor final que aquellos que viven en frente del televisor viendo el tomate. Algunos puede que dentro de unos años aparezcan en un libro de texto como enumeración de personajes importantes de la época junto a otras 10 personas. Ser una enumeración. Pero como dice el tango en mundo gira, gira y con cada giro nos va borrando.

Un placer leerte y preciosa foto.

Un abrazo.

Alunizado said...

Exacto.

Un placer leer tu comentario.Lo has puesto en un gráfico perfecto.

Un abrazo.

Ana said...

Qué bueno el leerte, como siempre tan pensante. Cuidado no vayas a renegar ante tanta falta de sentido común, que tanto pensar pensar acaba un@ renegando.
Me gusta una frase que acuñó (si ejke esto está bien dicho) Dalí que vino a decir algo de esto "no temas la perfección puesto que jamás la alcanzarás" y así es.
Lo bueno ejke también me viene a la memoria otra frasecita que nos contaba algo así como "Polvo eres y en polvo te convertirás y entre polvo y polvo..." me vino a la cabeza pero fuiste tú quien habló aquí de Dios...
Saludos pues.

Anonymous said...

Joderrrrr gato, no sé lo que somos los demás pero tú eres cojonudo y un auténtico Dios de las letras. Me has dejado sin aliento, con el corazón a cien y la adrenalina a tope. Y admirándote, babeando.
Todo todo, sí, sí, sí. No se puede comentar, haría el ridículo ante semejantes palabras y pensamiento tuyos.
Y dices que no existe la perfección? JA
Un beso gato en esta ocasión alucinado por alunizado

Anonymous said...

Jooooooo ya armé un dígalo con música ;)


No pueden decir que no promueva la música nacional.

Beeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeso'sssssssssssss

PD: Ya sabe mininito, cien, cien toítos pa usté.

Maik Pimienta said...

Eh gato, ¿Qué me estás contando? Me has dejado listo, macho. Sí que somos nada más que una broma de la física, y no dejaremos huella...nadie oirá nuestro árbol caer en medio del bosque universal. Y nos ahogamos dentro de nuestra propia vanidad.

Te dejo una letra de Jorge Drexler muysignificativa soy poco dado a esto del copia y pega, pero viene al pelo-:

La edad del cielo.

No somos más
que una gota de luz,
una estrella fugaz,
una chispa, tan sólo,
en la edad del cielo.

No somos lo
que quisiéramos ser,
solo un breve latir
en un silencio antiguo
con la edad del cielo.

Calma,
todo está en calma,
deja que el beso dure,
deja que el tiempo cure,
deja que el alma
tenga la misma edad
que la edad del cielo.

No somos más
que un puñado de mar,
una broma de Dios,
un capricho del Sol
del jardín del cielo.

No damos pie
entre tanto tic tac,
entre tanto Big Bang,
sólo un grano de sal
en el mar del cielo.

PD: Te recomiendo la canción, claro.

MaLena Ezcurra said...

Enzarpados vamos, todo lo pasamos por la calculadora.

Ay! de nosotros que pensamos que Tolstoi nos puede salvar.

Quiero a los abrazadores, a los que miran de frente y sienten que su única herencia es lo que se lleva puesto.

Mi reverencia, desde el alma en sincronía.

M.

Anonymous said...

Una vez más, llevo el tema al huerto donde planto mis acelgas y mis pimienticos...

Recomiendo encarecidamente la audición del tema "Enfermos" de "El Ultimo Ke Zierre", de su último disco...

Creo que encontrará Vd. una posible banda sonora a su post en él.

A mis brazos!

Tremendo.

P.D. ¿Quien dijo que los punkies ya no tenian nada que contar?

Lol V.Stein said...

Hola amigo,

Carnaza.. simplemente despiadado. Genial. Me encantó tu manera de expresarlo, desenmascarando toda la hipocresía y eslogans que nos han vendido.. La perfección a la que nos sentimos obligados nos lleva a la insatisfacción continua.. y es una cadena que como no se rompa nos puede hacer explotar.. mejor ser los raros a seguir el rollo, no?

Pd. No lo dudes: para perderse, ir y volver otra vez, Lanzarote. Famara es indefinible, simplemente un lugar para alunizar.. y en un sólo sueño..

bss

Anonymous said...

¿A qué lamentarlo, si el polvo que mancha la suela de vuestros zapatos es el descompuesto de miles de millones de anónimos cuerpos humanos cuyos nombres ni siquiera fueron borrados de ningún libro, puesto que sus nombres jamás fueron mencionados.

Pero ved aquí,
que sin tener intelecto, pluma, ni pergamino, usaron ellos su instrumento para humedecer sus minas y escribir en ajenos tinteros, en estrechos agujeros. Escribieron dejando surcos líquidos en otros cuerpos, rotularon pieles que desearon, lamieron siluetas que a su contacto jadearon.

Escribieron. ¿Cómo?.
Cada segundo fue un renglón,
Cada instante fue un párrafo,
Cada tiempo fue una hoja,
Cada vida acabada fue su única obra publicada.

Os llevan ventaja amigos: vivieron.
Y conscientes de su nada, fueron rellenando cada celdilla con sus deseos. No perdieron tiempo pensando qué quedaría de su nada. Antes al contrario: "Ya que sólo tenemos el hoy, que sea nuestro: devoremos la carnaza.
A más bocado menos vida, y así aceleraron su postrera nada.
Pero jamás perdieron baza, anotaron todo en el folio diario que les regalaban. Juntaron mucho las sílabras, omitieron las puntuaciones, así, escribiendo apretadamente hasta el último milímetro que les dieron para escritura, escribieron.

Muerto el autor, al infierno con él marchó su literatura.
Mas... os llevan ventaja