Thursday, November 23, 2006

Volver (Ficción VII)

Martes, 21 de agosto de 2006

Hora 09: 23. (Suena el despertador)


Acabo de despertar y no consigo abrir los ojos. Llevo unos cinco minutos intentándolo y no lo consigo. Además tengo una jaqueca inmensa. Me duele tanto la frente que no consigo escuchar los latidos del corazón, no los siento dentro del pecho, no puedo concentrarme en nada más ahora mismo que en las terribles punzadas que van de mi nuca al espacio despejado de pelo que hay entre mis cejas. Me va a estallar, me late cada una de las venas de la cabeza. Mi corazón decidió salir de viaje sin mi permiso mientras dormía. Debe tratarse de eso. Salió de su espacio habitual hasta hacer stop dentro de la cavidad craneal. Me late la cabeza y… me late el pene. Estoy empalmadísimo. Tengo la polla tan erecta que podría izar sobre ella el estandarte legionario mientras diez pelotones me la juran a paso militar sin perder un ápice de rectitud. ¿Por qué estoy así?

Trato de recordar.

Nada.

Me lo tomo con calma mientras procuro cambiar de postura. Tengo los brazos agarrotados y me pesan las piernas un quintal. Estoy hecho una auténtica mierda y no tengo ni la más remota idea del por qué. Voy a darme otros cinco minutos antes de levantarme e ir al baño. Muevo los pies hacia atrás. Toco unas piernas. ¡Joder, joder, jodeeer! Hay una tía en mi cama. Pego un respingo y separo los pies de su cuerpo con espasmo y espanto. No recuerdo nada. ¡La hostia! No recuerdo una puta mierda. No me muevo en unos minutos esperando haberla despertado, esperando que se levante, se vista y se vaya a tomar por culo. A todo esto ¿Le di por el culo anoche? Ni idea. Nada. Soy pura incongruencia e ignorancia. De lo único que me convenzo es de lo mayúscula que tuvo que ser la noche pasada. No sé en que sentido, pero así debió ser.

Entra el sol por la ventana, hace calor. Empiezo a olisquear algo. Es la cama. Aspiro más fuerte y me mareo. Un asqueroso hedor fétido se va apoderando de la atmósfera del cuarto. Noto mis muslos empapados de un líquido viscoso que empieza a resecarse. ¿Pero qué coño? Me muero de vergüenza con todo lo que se me viene a la cabeza. Lo primero es si vomité. Si lo hice debió ser al quedarnos dormidos, pero eso da igual. Por dios qué no haya vomitado. Tengo el estómago a pleno centrifugado. Conforme me desperezo voy descubriendo con horror los posos de mi descontrol. No puedo beber ni tomar comidas pesadas, me lo tienen prohibido. “Si te pasas atente a las consecuencias, tu estómago no es una caldera a prueba de fuego. Recuerda la ley del cubo”- me decía Mikel. Pienso en su ley del cubo.

Un cubo, como todo continente, tiene una cierta capacidad que no puede ser sobrepasada. Si llenas el cubo hasta cierto límite de líquido no puedes depositar dentro una piedra o el líquido tendrá que ser evacuado.¿Entiendes?

A modo de ejemplo, si te tomas diez copas una noche no te comas una hamburguesa con doble de queso después. Líquido, sólido o ambos saldrán de tu cuerpo sin remisión. Lo pienso y las posibilidades son infinitas. Creo que vomitar no es lo peor que podría haber pasado. Las vías de escape del cuerpo humano no se reducen sólo a la boca.

¡No quiero ni pensarlo!

Un retortijón hace que me convulsione y tenga ganas de vomitar. Tengo que levantarme ahora mismo, YA. Aparto las sábanas, el frió del suelo al apoyar los pies me espabilará. Está caliente, está mojado. He pisado un charco de…algo. La he armado tremenda. No quiero ni abrir los ojos. Me maldigo cien veces y a tientas consigo incorporarme. Voy descalzo, ciego, mareado, entumecido, dolorido, a punto de desfallecer hasta el baño usando de apoyo la pared. Dejando en cada baldosa huellas líquidas. Por fin estoy dentro y cierro la puerta intentando que no emita ningún sonido. Es ahora cuando quiero que no se despierte nunca. No hasta que esté preparado para el millón de insultos y golpes que me va a dar. Sea quien sea:

¡Hijo de la gran puta! Voy a matarte. Cerdo, cabronazo de mierda. ¡¿Qué has hecho conmigo?! Voy a mi casa y volveré para darte una paliza. Voy a hundirte la cara en tu propia mierda, hijo de perra. No vas a poder salir de nuevo a la calle. Te voy a hundir en la miseria…

Quiero me trague la tierra, no, quiero desaparecer para siempre. Quiero no haber existido nunca. Agua, agua, necesito echarme agua en la cara. Pensaré mejor. Recogeré todo lo que pueda y qué coño, puede que haya sido ella, es más, puedo convencerla de que ha sido ella y no volver a vernos nunca. Nos gritaremos, nos pelearemos. En realidad si que soy todo lo que me llamará sólo por pensar esto. Estoy sudando, sudo como nunca antes lo había hecho. Necesito mojarme la cara. Abro el grifo de agua fría y me mojo las manos, dejo que me chorree a gusto antes de llevármelas a la cara,restregar con fuerza y secarme con la toalla.

Ábrelos, ábrelos, ábrelos…- pienso con fuerza.

Me asusto al verme pálido como la parca, tengo unas ojeras del quince, la lengua como papel de lija y las manos…

…todo pasa a cámara lenta. La toalla cae al suelo a cámara lenta, como plomo. Mis brazos van hacia delante a cámara lenta. Mis manos asían el pomo de la puerta a cámara lenta. Todo está desenfocado. Estoy abandonando mi cuerpo. Entro de nuevo a la habitación. Me muevo torpemente, mis pies se arrastran. Las lágrimas heladas del más puro miedo me caen por las mejillas. Todo a cámara lenta.No quiero que se despierte nunca,no va a despertarse nunca.

La discoteca, las copas, la caza, su cuerpo, mi cuerpo. Hablamos, reímos, bebimos, volvimos a beber, nos fuimos a casa, follamos. Gritos, golpes, clemencia, horror… No he vomitado, no me he meado en la cama. Es todo mucho peor. No tengo resaca, ni mi estomago quebró la ley del cubo. Recuerdo todo.

La sangre, su sangre en mis manos, en mi pecho. He dormido en un lecho de sangre. Hasta el abrecartas que tiene hundido en el pecho me es vívido en la memoria. Lo recuerdo todo, no recuerdo nada. Me estoy muriendo en vida. Sólo veo sangre. Sangre.

¡Por dios, un cuerpo no puede guardar tanta sangre!

Mikel no me volverá a dar permiso, no más salidas, no más “estoy preparado”. Me pasaré la vida preso. Me joderan de lo lindo o lo que es peor: viviré en la puta celda acolchada toda la vida. Me reventaran el cerebro. Anularan mi voluntad. Tengo que salir de aquí, no pienso volver allí dentro, no pienso volver a ponerme la camisa. Mierda de pastillas, mierda de pastillas. ¿Dónde coño dejé la mierda de pastillas?


Martes, 21 de agosto de 2006

Hora 09: 38. (Suena el despertador)



Acabo de despertar y no consigo abrir los ojos. Llevo unos cinco minutos intentándolo y no lo consigo. Además tengo una jaqueca inmensa.

-Oye tío, me estás asustando. ¿Te pasa algo?

-¿Qué…? ¿Quién…?

-Laura, ¿recuerdas? Menudo despertar el tuyo. Hemos pasado la noche juntos. Es hora de levantarse, ha sonado dos veces el despertador.Me tengo que ir a trabajar.

-Me va a reventar la cabeza.

-Te dije que no bebieras tanto. Vaya miradita me estás echando ¿Pasa algo? No soy un fantasma,reacciona,que tengo que vestirme, cielo.

-Necesito una ducha.

- Y que lo digas, no has parado de sudar en toda la noche. ¿Un mal sueño?

-Oye, ¿has visto un botecito de pastillas por ahí? Debería tomar alguna. Estoy en tratamiento.

-No, que recuerde, las habrás perdido por ahí. Tengo paracetamol en el bolso. ¿Te acerco dónde te las recetan?

-No gracias, déjalo.

-Como quieras. Esta noche salgo a las nueve. ¿Repetimos?

-Sí, claro. Precioso abrecartas.

-Un regalo. ¿A las nueve?

-A las nueve.


No pienso volver allí dentro,pase lo que pase.

15 comments:

Anonymous said...

Bufff... genial, sublíme, pero que imaginación tienes mi niño... que fuerza y facilidad para enganchar como si de una novela de autor consagrado se tratára o tratáse. Tú te fuiste de mi blog algo en llamas y yo me voy del tuyo alucinada... Por cierto... ¿te apagaste ya?
Besos... de esos...

P.D. Por favor... nada de "no me lo merezco y todo eso... vale???
Gracias bary

La puta que no te parió said...

Que giro!
La verdad, la verdad, nunca me ha gustado la locura y el asesinato, ni en sueños, ni en literatura.
Tal vez solo sea que traslade un momento oscuro mío a tus letras...
No lo puedo definir, solo sé que me deja un mal sabor.
De todas formas, como siempre:
Beeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeso

eggy said...

Vengo de gira bloguera y, por favor, las cosas que estoy leyendo...
Genial gato, sin palabras.

Alunizado said...

Calma:Sólo puedo quedar lleno de gratitud sincera por tu palabras,así que no digo nada más que:graciaaas.

Besos!!

Bio:Espero quitarte ese mal sabor cuanto antes,Reina.Ojala cada asesinato estuviese sobre un papel,ojala el arma homicida fuese una pluma,ojala la locura y los actos violentos en que deriva sólo fuesen literatura.Viendo cómo está todo me daría por "contento".

Ojala sólo hubiese relatos y brindis.

Beeeeeeeeeeeeeeeesos(como siempre,como nunca faltarán).

Eggy:Gracias,que viniendo de donde viene el comentario me siento honrado.

Abrazos,genio!

Anonymous said...

Wowww!!! que historia! así como con nuestras mentes hacés lo que querés con las palabras.
Genial, impresionante!
Qué sensación que me queda, ufff...

Besotes enormes gatito!

Alunizado said...

Persio:Querido,un placer verte por aquí,ese es el placer.Gracias y a seguir en la brecha con Ringo,un regalo para la vista y el oído siempre.

Un abrazo,auténtico!!

Arte:uyssssss...que no sé que decirte.Mente la tuya cada vez que voy para allá.Un miauuuuuuu a tu wowwwwww ;)

Besotes iguales para ti,guapa!!

Anonymous said...

ajajaja, buf que historia!

La puta que no te parió said...

Gato: ¿Es mucho pedir que Ahora no golpee tan duro?
Está bueno que los relatos tristes quedaran en las palabras.
Pero ¿Cómo se hace para hacer realidad esas palabras que se esperan vivir y dejar en letras muertas aquellas que no merecen la vida?
Beeeeeeeeso

Anonymous said...

Bio cambió de foto?

La puta que no te parió said...

No Arte, me hackearon!
¡¡¡Ud. hace cada preguntas a veces!!!

Umma1 said...

Excelente.
No digo más porque lo estropearía.

Felicitaciones y saludos

Anonymous said...

No puedo decirte querido gato nada que ya no te haya dicho, que eres lo más para mí, que en ti encuentro al leer lo que busco, lo que me llega, lo que me llena, lo que me enciende, lo que no esá escrito.
No me olvides, yo no me voy a olvidar de ti.
Hasta pronto
Mi beso más dulce...

Alunizado said...

Lost in traslation - umma1:Gracias por pasaros y por vuestros comentarios.Estais en vuestra casa siempre que querais venir. ;)

Saludos.

Bio:Reina,no es mucho pedir,accedo gustoso.

Besooooooo.

Arte:Sí,y vaya cambio eh?!!

Un besote.

Calma:Ays Calma,sin palabras estoy ahora mismo.No me despido de ti ni me olvido,y contestare en cuando las encuentre (puedas leerlo o no).

UN BESAZO y hasta dentro de poquito.

MaLena Ezcurra said...

Maravillos relato noire.

Te estrujo en un beso.



Para todos buen domingo, desde Buenos Aires, entre brumas. :)

Alunizado said...

Malena:Gracias guapa,siempre me ha gustado el noire.Paint in black,que voy pa tu casa.

:***