Wednesday, June 07, 2006

Adalides de la seriedad


Corro el riesgo de que más de un adalid del negro sobre blanco (o cultureta, como dice un amigo) asiduo a esto de los blogs chasquee la lengua y menee la cabeza con carácter reprobatorio y digo: reconozco que no leo tanto como debiera, aunque, y como soy mi propio abogado de oficio, diré en mi defensa que hablo de literatura “seria”.

A lo que voy, que leo poco. ¿Por qué no tengo tiempo (más que gastada respuesta de un alto porcentaje, según las encuestas, de los felizmente casados españoles)? Unas veces sí (y no pertenezco al selecto gremio ¡Conste en acta!, pide la acusación) ¿Por qué no me apetece leer según que cosas? Para qué negarlo, otras veces también. (¡Al paredón con él!)

Pues bien, agarro (curiosamente) esta mañana el qué leer de Abril y me encuentro con la cabecera del tema del mes, que reza así: "A los escritores les ha dado un ataque de solemnidad y han abandonado la novela de humor, el género que proporciona una visión más crítica del mundo (Antonio G. Iturbe)”.

Y yo digo, ¿sí? Cómo está La Nación (pongan entre ¿? a Cataluña, Euskadi y la zona sur de la comarca de Mordor)

El caso es que todo esto no me sorprende. En un corral como el nuestro, en el que la envidia es pecado nacional y la tolerancia un bien escaso, a ver quien es el chulo que es capaz de reírse de si mismo ante los demás con todas las de la ley; y digo reírse en general. Soy de la opinión de que aquí corres el mismo peligro negándote a tomar una caña, que diciendo que te gusta el fútbol, que opinando que Leonor (la princesita) guapa, lo que se dice guapa… ¿lo ven, no me atrevo?.. o que admitiendo que lo tuyo es Terry Pratchett; tildándote de “raro-rajao”, “adicto consumado al opio del pueblo”, “republicano subrepticio” y “friky”, según el caso.

Personalmente aplicaría las palabras de Antonio G. Iturbe al ocio, en general. Dile a Pedro, el saxofonista estirado del tercero, que su hijo se parte de la risa con los "Mojinos Escozios" y que no aguanta a "Charlie Parker" y el bebop. O a tu hermano el cinéfilo que sí, que quieres alquilar "Tapas" y pasas de ver "Persona" de Bergman. O a tu profesor de literatura que antepones a "Toole" sobre cualquier literato “serio”.

-Eres carne de cañón, nene. No tienes ni idea.

No se lo tomen tan en serio, queridos literatos. Abandonen tanta sobriedad en sus comparecencias en público, que más de uno pensaría que aquejan de problemas intestinales. Que la cultura, la coherencia, y la seriedad pueden estar cogidas de la mano del humor, la crítica mordaz y el cinismo más fino y elegante, sin caer en la frivolidad ni rebajar el nivel de una novela (Como muestra un botón, que se dice: La Conjura de los Necios).

Por favor, hágannos reír de vez en cuando con ustedes y no de ustedes.

2 comments:

Maik Pimienta said...

Totalmente de acuerdo Lunero. Hacen falta más Eduardos Mendozas por el mundo que aliñen la inteligencia con la realidad. La visión crítica parece que dejó de estar de moda, y se la hemos dejado a los políticos en exclusiva, lo que es de un triste que ni te cuento.

Un saludo!!

Alunizado said...

Muy triste,sí,Maik.Sólo hay que ver como está el patio.

Saludos,compañero.